La terrible reestructuración acometida en el sector en los últimos años ha ocasionado también trastornos de salud en los empleados.
Al recorte de plantillas (se ha despedido a más de 84.000 trabajadores) y el masivo cierre de oficinas (38%), se han sumado otras medidas traumáticas sobre el personal como EREs o ERTEs, que han provocado un aumento de los riesgos psicosociales entre los empleados.
El estudio que hemos elaborado en FINE cifra en más de 10 millones las horas anuales no trabajadas, de las cuales aproximadamente más de la mitad se corresponden con bajas por estrés.
Calculamos que el absentismo en el sector financiero registra en la actualidad una pérdida de 4,44 horas por trabajador y mes. Debemos tener en cuenta, que en nuestro sector prácticamente no existen los accidentes de trabajo. Además, por nuestra información y experiencia, más de la mitad de las bajas entre nuestros compañeros están causadas por el estrés laboral.
¿A qué se debe esta situación? Sobre todo, a las prolongaciones de jornada salvajes por parte de los empleados que mantienen su puesto de trabajo, por la tremenda presión empresarial a la que se ven sometidos y ante el temor a formar parte de la siguiente lista de despedidos.
Los balances económicos apuntan que, en los últimos 20 años, la productividad del sector ha crecido un 428%. En FINE lamentamos que ese importante incremento de productividad se deba al sobresfuerzo realizado por los empleados, con los consiguientes riesgos para su salud.
El estudio de FINE ‘Empleo Postcrisis en la Banca Española’ no sólo destaca las consecuencias que esta situación tiene en términos de salud para los empleados del sector financiero, sino también para las arcas del Estado ya que las prolongaciones de jornada no siempre se declaran ni se cotizan.
Desde FINE os lo explicamos en el vídeo que podéis ver en nuestras redes sociales.
Si queréis consultar el informe completo pinchad aquí.
¡Seguiremos informando!
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